Frío, lluvia, viento e incluso nieve. Son los ingredientes básicos que nos brinda el otoño. Tras un verano marcado por altas temperaturas, llega el momento de sacar la ropa de invierno, protegerse del frío y evitar constiparse.
Conducir es uno de los mayores placeres que disfrutan las personas. Para una gran cantidad de ellas es una excusa perfecta para desconectar y relajarse. A pesar de ello, no todos se sienten con plena tranquilidad al estar en carretera y más, cuando conducen en moto. Si nos encanta conducir en ella, lo cierto es que cuando llega el frío tendemos a dejarla en el garaje por miedo a la concepción de que sea más insegura.
Sin embargo, cada vez más motos Yamaha cuentan con mayores complementos que permiten que los viajes sean más cómodos. El parabrisas, elementos de calefacción o distintas mejoras en los neumáticos, permiten que nos sintamos más seguros. Por si fuese poco, la equipación en las motos ha mejorado notablemente en los últimos tiempos y por ello, los nuevos tejidos aumentan la protección contra la lluvia y las bajísimas temperaturas que padecemos en algunas ciudades.

Aquí te dejamos algunos consejos:
- Lo primero que debemos hacer es vigilar el estado del asfalto. En caso de que permanezca de color gris, significará que está correcto, pero si notamos que está oscurecido, podría ser signo de que la superficie es resbaladiza. Por otro lado, en zonas montañosas existe la posibilidad de que se formen placas de hielo que nos hagan perder el control de la moto. El reflejo blanquecino en el asfalto se crea por la sal que se echa para que no se congele. Un aspecto importante que debemos tener en cuenta es limpiar la moto al llegar al destino, puesto que es corrosiva y podría estropear algunos elementos de la moto. El faro y el piloto trasero son los elementos que más se ensucian cuando circulamos en invierno, por lo que tendremos que limpiarlos en cada parada para poder ver y que los demás coches y motos nos vean.
- La ropa que nos pongamos también es importante. Debemos llevar ropa de invierno, guantes de moto y pantalones de invierno. Cuando conducimos a escasas temperaturas, es normal que al conducir la sensación térmica sea aún más inferior. Es decir, si observamos que los termómetros marcan 5 ºC, la realidad es que este número será inferior por las ráfagas de viento.
- En cuanto a los neumáticos, tenemos que escoger los de invierno y los frenos más idóneos para estos días de frío. Lo mejor es optar por neumáticos de tipo touring, por el hecho de que necesitan un menor calentamiento y agarran mejor en el asfalto cuando hay temperaturas bajas. Es importante que sigamos el rastro que dejan otros vehículos para así guiarnos y evitar accidentes
- Otro consejo muy útil es calentar la moto antes de ponerla en marcha. Lo ideal es calentar el motor de la moto al ralentí hasta que el refrigerante llegue a los 50 ºC. ¿Por qué es importante? La razón se explica porque la lubricación de las partes de la moto será óptima y con ello, mejorará el funcionamiento del motor y el resto de elementos. Para evitar perder el tiempo, lo mejor es calentarla mientras nos equipamos con diferentes elementos de equipación. En este sentido, los botines impermeables serán de enorme utilidad. Sin embargo, tenemos que fijarnos en que no nos molesten a la hora de conducir y que no puedan engancharse con palancas de cambio o de freno.
- Protege la moto con una funda que sea adecuada siempre que vayamos a dejarla en la calle. Así, los distintos componentes que tiene estarán más resguardados de la lluvia y sobre todo, de las heladas. Todos estos consejos son útiles, pero sin duda, el mejor de todos es informarse previamente de cuál es el estado de la carretera antes de emprender la marcha. El parte meteorológico también es importante consultarlo, para que vayamos con la idea de que debemos tener precaución.
- Además de ello, tenemos que revisar todos los componentes que tiene nuestra moto en un taller, no solo durante un viaje, sino periódicamente. De este modo, podremos viajar con total tranquilidad.